Es fácil para estos idiotas inútiles ser tan desdeñosos de la amenaza muy real que representa la violencia izquierdista. Nadie amenaza a Richard porque no es relevante y su trabajo no tiene ningún impacto en la cultura. Así que, en cambio, puede sentarse al margen sacudiendo la cabeza con aire de suficiencia ante aquellos de nosotros a quienes estos militantes de izquierda quieren matar real y vocalmente.