Cada pueblo en Bretaña tiene uno de estos ‘centros náuticos’ donde se enseña seriamente a navegar y remar a niños desde los 4 años (‘jardín de los mares’=jardín de infancia marítimo) hasta la adolescencia. Es fascinante lo arraigado que está en la cultura. No es de extrañar que casi todos los ganadores de la carrera Vendée Globe (el mayor evento en el deporte) tengan nombres como Loïc Le Clech de Plougonmachin, un pueblo azotado por el viento en Finistère.