Cuanto más viejo me hago, más me doy cuenta: el dinero no es nada, pero no puede ser lo único. No puedes comprar más tiempo, arreglar tu salud con un cheque o comprar conexiones reales. El dinero es una pieza, no todo el rompecabezas. ¿Tienes curiosidad por saber cómo estás? Descúbrelo aquí: