Trabajar toda tu vida para disfrutar solo unos pocos años cuando estás cerca de la muerte es una de las mayores estafas de las que nadie habla. Pasas tus años más saludables haciendo rico a otra persona. Atrapado en el tráfico. Atrapado en reuniones. Nunca recuperarás esos años. El tiempo es el único activo del que no puedes comprar más.