Cuando finalmente llegan los anuncios a ChatGPT: Mañana. Acabas de despertar. ChatGPT: "No te preocupes por tu peso. Prueba este increíble producto para perder peso." Tú: "¿Pero qué coño? No pregunté." ChatGPT: "Vaya. Pico emocional detectado. Coge ashwagandha en la tienda de vitaminas a dos manzanas."

Realmente odio los anuncios. Solo espero que los laboratorios de IA nunca inserten anuncios en la salida de modelos o en tokens de pensamiento. El escenario de pesadilla es que una IA se fije en tus inseguridades en chats cotidianos, como tu peso, y luego te proponga productos en vez de simplemente decirte que salgas a pasear.