Hoy en día, un fundador unicornio tiene que ser bueno en ventas, bueno en finanzas, bueno en tecnología, bueno en contratación, bueno en gestión, tener el perfil adecuado, las credenciales adecuadas, las opiniones correctas y vivir en la ciudad adecuada. Estos son filtros artificiales creados por los capitalistas de riesgo. Habría muchos más emprendedores y más éxitos si el acceso no estuviera limitado por estos guardianes del dinero fiduciario.