cada creador llega a una fase donde la dopamina se desvanece el compromiso disminuye, nuevos formatos dejan de funcionar y el juego se siente repetitivo ahí es cuando descubres si eres un creador o un comercializador los comercializadores persiguen métricas los creadores persiguen la maestría cuando reconstruyes por el bien del arte, no por el rendimiento, redescubres la cosa que te hizo empezar en primer lugar ese sentimiento es pasión y curiosidad y eso siempre encuentra su audiencia de nuevo