Si estás sufriendo una gran pérdida en tu cartera este mes, pregúntate: 1) ¿Estabas demasiado concentrado? 2) ¿Estabas demasiado apalancado? Si respondiste que sí a alguna de estas preguntas, es un buen momento para dar un paso atrás y evaluar tu estrategia de gestión de riesgos.