¿Son los juegos Web3 solo clones de Web2 con tokens añadidos? Esa pregunta dividió al grupo. Algunos lo llamaron evolución. Otros lo llamaron regresión. Los estudios iniciales perseguían la originalidad y fracasaban rápido. Ahora la mayoría juega a lo seguro, reciclando bucles de Web2 y añadiendo cripto encima. Copiar no es nuevo. Incluso Web2 se construyó sobre clones. El problema no es la imitación. Es la falta de innovación significativa. Reemplazar el oro con tokens no es diseño. Es decoración. La cadena debería cambiar cómo funcionan los juegos. No solo cómo se financian. Algunos culparon la brecha tecnológica. Las herramientas aún viven en motores de Web2. El diseño completamente onchain está años atrás y es difícil de implementar a gran escala. Otros culparon a los inversores. Cuando el riesgo quema millones, la financiarización convierte la creatividad en cumplimiento. Algunos dijeron que copiar es un puente, no un defecto. El juego familiar ayuda a los jugadores a integrarse antes de que llegue la verdadera innovación. Pero los verdaderos creadores están empujando más allá de las plantillas. Los pocos que rompen el molde simplemente se sienten diferentes. ...